Militares cubanos tienen escondidos miles de millones de dólares mientras el pueblo sufre aguda crisis
En medio de una de las crisis más profundas que ha enfrentado Cuba desde la caída de la Unión Soviética, nuevas revelaciones financieras ponen en entredicho las afirmaciones del gobierno cubano sobre su incapacidad para adquirir medicamentos y mejorar los servicios básicos debido a las sanciones estadounidenses.
Documentos filtrados revelan que GAESA, el poderoso conglomerado empresarial de las Fuerzas Armadas cubanas, acumula miles de millones de dólares en activos y cuentas bancarias, mientras la población carece de medicamentos, alimentos y servicios básicos.
Registros obtenidos por el Miami Herald revelan que Gaviota, una empresa controlada por las Fuerzas Armadas que administra hoteles turísticos, tiene aproximadamente $4.3 mil millones en cuentas bancarias.
Esta cifra es 13 veces superior a los $339 millones que el gobierno asegura necesitar anualmente para abastecer las farmacias de la isla.
Mientras tanto, el sistema de salud cubano carece del 70% de los medicamentos esenciales, la red eléctrica sufre frecuentes colapsos y los apagones son constantes. La inversión en turismo, que representó el 36% del gasto gubernamental entre 2021 y 2023, ha superado ampliamente los recursos asignados a áreas críticas como la salud y la agricultura. A pesar de estas prioridades desbalanceadas, 7 de cada 10 habitaciones de hoteles estatales permanecieron vacías en 2023.
Una crisis de salud y servicios básicos
La situación en los hospitales cubanos es alarmante. Según el primer ministro cubano, el sistema de salud carece del 70% de los medicamentos esenciales, lo que ha provocado la muerte de numerosos pacientes.
La falta de gasolina agrava la situación: en Güines, un hombre tuvo que transportar el cuerpo de un amigo fallecido en un bicitaxi debido a la falta de vehículos disponibles. Montañas de basura se acumulan incluso en zonas turísticas como El Vedado, mientras los apagones dejan a la isla en completa oscuridad durante horas.
A pesar de estas circunstancias, el conglomerado militar GAESA (Grupo de Administración Empresarial S.A.), que controla los sectores más lucrativos de la economía cubana como el turismo, las remesas y el comercio minorista, mantiene sus finanzas en secreto.
Según los documentos filtrados, GAESA desvía cientos de millones de dólares hacia proyectos que priorizan la construcción de hoteles, mientras otros sectores críticos, como la salud, la educación y la reparación de la red eléctrica, carecen de recursos básicos.
Dos economías paralelas
Los documentos financieros de GAESA revelan que empresas como Almest y Gaviota tienen activos netos por un valor de 22.756 millones de pesos cubanos, cifra que equivale a casi $1,000 millones al tipo de cambio estatal.
Además, Gaviota reporta más de $4.2 mil millones como “activo circulante” en sus cuentas bancarias, dinero suficiente para cubrir las necesidades anuales de la red eléctrica ($250 millones) y los suministros médicos ($129 millones).
Este uso de recursos contradice la narrativa oficial del gobierno cubano, que culpa exclusivamente al embargo estadounidense por la crisis. “Construir hoteles mientras el resto de la economía colapsa evidencia que existen dos gobiernos paralelos”, señaló el economista Pavel Vidal, de la Pontificia Universidad Javeriana en Colombia.
Impacto de décadas de mala gestión
Aunque el embargo estadounidense ha tenido un impacto significativo en la economía cubana, los expertos coinciden en que la crisis actual también es resultado de décadas de mala gestión, un modelo económico centralizado obsoleto, políticas monetarias fallidas y una recuperación insuficiente tras la pandemia de COVID-19.
GAESA, liderada por las Fuerzas Armadas, ha intensificado esta situación al separar sus finanzas de las arcas estatales. Mientras el gobierno lucha por justificar la escasez de recursos, los registros obtenidos sugieren que existe suficiente dinero para mitigar la crisis humanitaria que afecta a millones de cubanos.
Conclusión
Las revelaciones sobre los fondos ocultos de GAESA subrayan la urgencia de abordar la gestión de los recursos en Cuba. En un momento en que la población enfrenta privaciones extremas, las prioridades del gobierno y del conglomerado militar están siendo cada vez más cuestionadas. La falta de transparencia y la desviación de recursos esenciales para proyectos secundarios no solo agravan la crisis, sino que ponen en tela de juicio el compromiso del gobierno con el bienestar de su pueblo.
Fuente Martinoticias
30 de Diciembre 2024