Duro golpe para Putin, Europa corto por completo su dependencia energética con Rusia

Europa Occidental se ha liberado definitivamente de las importaciones directas del petróleo ruso, lo que supone un golpe para Vladimir Putin y la economía rusa, sugiere una investigación de la consultora energética europea Rystad.

Los analistas descubrieron que el Reino Unido y gran parte de Europa han revertido su dependencia del petróleo y gas ruso que tenían antes del conflicto de Ucrania, cambiando a otros proveedores como Estados Unidos y Canadá.

Jorge León, vicepresidente senior de mercados petroleros de Rystad, dijo: “Creo que la gente subestimó lo flexible que es el sistema energético.

“Justo antes de la guerra, la sola idea de que dejaríamos de comprar petróleo y gas directamente de Rusia habría sido una locura. Pero en gran medida ha sucedido”.

Según Eurostat, en 2020 las importaciones procedentes de Rusia representaron el 39% del gas utilizado en la Unión Europea, el 23% de las importaciones de petróleo y el 46% de las importaciones de carbón.

El Reino Unido dependía de Rusia para aproximadamente el 30 por ciento de su diésel, el 27 por ciento de su carbón y hasta el 10 por ciento de su gas.

Según las cifras oficiales, esta cifra ha caído prácticamente a cero.

Se cree que todavía han llegado cantidades de combustible fósil ruso a través de refinerías de otros países, aunque el señor León –que hablará esta semana en la Semana Internacional de la Energía en Londres– dijo que las cantidades totales siguen disminuyendo.

León dijo que la clave para romper el dominio ruso había sido un aumento en la oferta de otras fuentes que también estaban fuera de la OPEP, el cártel formado principalmente por países de Medio Oriente para controlar la oferta y los precios.

Dijo: "Los suministros fuera de la OPEP no suelen crecer tanto, pero 2023 fue un año enorme".

“Los astros se alinearon y llegaron nuevos proyectos de Brasil, Argentina, Canadá, Noruega, etc. Entonces eso nos salvó en cierto sentido.

"Y si nos fijamos en Estados Unidos, el crecimiento ha continuado con mucha, mucha fuerza hasta 2023".

La crisis económica que afectó al Reino Unido y Europa desde 2022 también influyó, al disminuir la demanda general de energía.

León dijo: “La demanda en la OCDE [un grupo de países ricos desarrollados] en realidad disminuyó el año pasado y probablemente en 2024. Así que, en cierto sentido, tuvimos suerte de que nuestro crecimiento económico en 2023 fuera menor”.

Contar el suministro energético con Rusia ha resultado una tarea lenta. León advirtió que parte de la aparente disminución del comercio con Rusia podría ser ilusoria, porque el Kremlin estaba vendiendo más petróleo crudo a países como India.

Allí podría procesarse en productos como el diésel que podría venderse en el Reino Unido y Europa.

Dijo: "El petróleo que inicialmente fluía de Rusia a Europa ahora va a China e India, desde donde los proveedores envían a Europa".

El Centro de Investigación sobre Energía y Aire Limpio, que rastrea las exportaciones de energía rusas por valor y destino, estima que Rusia ha ganado 605.000 millones de euros (517.000 millones de libras esterlinas) por las exportaciones de combustibles fósiles desde febrero de 2022, cuando invadió Ucrania. Alrededor de 188.000 millones de euros de ese dinero provinieron directamente de los países de la UE.

Ashley Kelty, directora de investigación de petróleo y gas del banco de inversión Panmure Gordon, dijo que el Reino Unido había detenido las importaciones directas de petróleo desde Rusia, pero que la realidad era más compleja.

Dijo: “El Reino Unido dependía de Rusia para el combustible diésel: el 30% procedía de Rusia antes de las sanciones. Este ha sido sustituido por diésel ruso refinado en India y China, y por tanto fuera de sanciones.

“La UE dependía mucho del gas ruso: alrededor del 40 por ciento de todo el gas utilizado procedía de Rusia. Esto ha sido reemplazado por el GNL estadounidense y por la destrucción de la demanda a través de dos inviernos suaves y el colapso de la demanda industrial alemana.

“Así que la dependencia de Rusia se ha roto en gran medida, pero siguen siendo importantes para el suministro global, ya que China e India compran gran parte de sus productos ahora, aunque con grandes descuentos. Si se vieran obligados a excluir a Rusia, habría otra crisis energética con enormes déficits en el suministro de crudo y GNL”.

Fuente El Telegrafo

25 de Febrero 2024